10/01/2017

Calidad de Exportación

Su expansión internacional se inició en 1994, cuando ingresó al mercado chileno, y no cesó en seguir abriéndose camino en el mundo entero, llegando a conquistar el difícil mercado europeo a través de Alemania y España, el competitivo mercado norteamericano, y por supuesto el de Centroamérica y Sudamérica, donde destacan Guatemala, Honduras, República Dominicana, Costa Rica, Argentina, Ecuador, Colombia, Venezuela, Uruguay y Brasil.

John Gleiser comenta que “entre los planes de expansión a mediano plazo están seguir incrementando las ventas a Brasil, consolidar el mercado centroamericano y entrar agresivamente con nuestros cierres peruanos al mercado mexicano”.

“En Corporación Rey estamos tan convencidos de la calidad de nuestros cierres que durante años hemos lanzado el mismo reto a todos los peruanos que usan cierres Rey: Garantía de por Vida”, recuerda don Samuel.

“Un componente importante para consolidar la exportación de nuestros cierres es que estos representan también una marca país. Siempre buscamos consolidarlos como producto peruano de exportación en todos aquellos mercados en los cuales incursionamos”, sostiene John Gleiser.

“Incluso –menciona Alex Gleiser– Corporación Rey brinda asistencia técnica a aquellos medianos y pequeños confeccionistas que quieran exportar. Nosotros contamos con las certificaciones internacionales que nos permiten exportar y no tenemos ningún recelo en compartir el conocimiento adquirido con nuestros aliados estratégicos. Al final, el éxito de un confeccionista que utiliza productos Rey es nuestro éxito también”.

Corporación Rey representa un hito importante en la historia económica del país, porque desde hace 60 años tiene el compromiso de promover lo que el Perú produce, pero transformando materias primas en productos manufacturados con calidad de exportación. En ello radica su gran éxito a lo largo de todo este tiempo.

Don Samuel nos cuenta didácticamente la historia de este círculo virtuoso de la producción con valor agregado. “En el caso de los cierres Rey, primero los peruanos tuvimos que extraer el cobre de las minas, materia prima que es sometida a procesos de fundición y electrólisis para formar las barras de cobre que se convierten, a su vez, en alambrón de cobre por colada continua, en mezcla con zinc, que nosotros transformamos en alambres técnicos de aleaciones de cobre. Este alambre es estampado y toma diversas formas de dientes que se unen a la tela que resulta en la cremallera del cierre. También usando nuestro zinc para convertirlo en Zamac, con el que hacemos llaves por preso-fusión. Luego de un proceso de ensamblaje se convierte en un cierre nacional de alta calidad, reconocida resistencia y duración, vendido hoy en el Perú y el mundo”.

El 50% de la producción total de cierres Rey se destina a surtir el mercado local, con lo cual se apuesta activamente por darle fuerza a campañas como Cómprale al Perú que acertadamente promueve el Ejecutivo.

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