Sin fertilizantes, ni químicos en su producción y recolectado a mano el algodón orgánico aumenta su popularidad para diversos usos. La producción de prendas de algodón puede traer consigo aspectos negativos que afecten al medioambiente. Entre ellas podemos destacar la generación de vertidos tóxicos, el uso de semillas modificadas genéticamente y la utilización de grandes cantidades de agua. Sin embargo, existe una alternativa sustentable: el algodón orgánico.

En Corporación REY incorporamos a nuestros productos una línea de cierres a base de algodón orgánico 100% peruano para que los diseñadores cuenten con nuevas posibilidades para agregar sostenibilidad en sus prendas. Además, cumplimos con el Standard 100 by OEKO-TEX® que indica que nuestros artículos están

libres de sustancias nocivas, como productos cancerígenos, tóxicos o alérgicos y que cumplen con los requisitos ecológico-humanos establecidos actualmente. Más de 70 años en la industria de la moda, nuestro compromiso y responsabilidad social nos avalan.

 

El algodón orgánico es uno de los caballitos de batalla de la sostenibilidad en la industria de la moda. Al igual que el algodón convencional es ligero, transpirable y absorbe fácilmente los tintes pero, eso sí, tiene origen en la agricultura ecológica, no utiliza fertilizantes ni pesticidas en su producción y se recoge a mano. Además, esta materia prima es más verde y más responsable que el algodón tradicional ya que el agua que se utiliza para el cultivo es de lluvia o la que almacena la propia tierra. La agricultura orgánica tiene como objetivo hacer un uso sostenible de los recursos naturales,

razón por la cual no permite el uso de insumos externos químicos o sintéticos. También impide el uso de semillas modificadas genéticamente. Cabe destacar que para que la producción de algodón se considere orgánica tiene que estar certificada por los organismos correspondientes siguiendo las normas y disposiciones vigentes. Entre los requerimientos, se verifica que no haya organismos modificados genéticamente y se debe cumplir con diferentes exigencias que implican que afectan a su cultivo y procesamiento. En Perú, al igual que en el resto del mundo, estos productores pueden contarse con los dedos ya que la producción de algodón orgánico es una porción muy pequeñita dentro del universo del algodón.

 

Cumplir con las demandas que solicitan las certificaciones asegura la trazabilidad del proceso de producción. Además, garantiza que la fibra producida es orgánica, que cumple con requisitos ambientales específicos, con parámetros técnicos de calidad que contribuyen a la lucha contra el fast-fashion y con criterios sociales que favorecen al trabajo digno. Nuestro proveedor de hilo de algodón orgánico cuenta con el certificado GOTS (Global Organic Textile Standard) una de las certificaciones más completas que pueden adquirirse. De este modo, garantizamos que las fibras orgánicas no han entrado en contacto con fibras convencionales y que se respetó al medioambiente durante el proceso de fabricación. Al adquirir algodón orgánico certificado contribuimos a mejorar la calidad de vida de las personas que trabajan en los cultivos. En estas cosechas, las condiciones laborales son aseguradas evitando el trabajo esclavo y la salud de los trabajadores no es arriesgada al no estar expuestos a la inhalación o al contacto con productos altamente tóxicos.

 

Sabemos que uno es más sostenible que otro y menos contaminante, pero ¿qué diferencias existen? El nivel de pureza del algodón se mide por la manera en que fue recolectado. Mientras que el algodón convencional se recoge a máquina, el algodón orgánico se recolecta de manera manual para preservar cada una de sus fibras intactas. Es por eso que las prendas de algodón orgánico son tan suaves al tacto y duraderas. Además, estas fibras son más largas. El algodón orgánico es una alternativa saludable para la piel ya que no se emplean pesticidas ni químicos dañinos para el cultivo y las plagas se controlan con insectos capaces de acabar con ellas. Tampoco se utilizan tintes o blanqueadores químicos como en el algodón tradicional, en este caso se aplican tintes naturales y con base de agua en la fabricación de las prendas orgánicas. Para resumir, el algodón orgánico cuida a la industria de la moda para que los diseñadores apuesten a diseñar ropa sostenible que cuide al medioambiente, a los trabajadores y a los consumidores. El algodón orgánico es una materia prima clave para generar prendas de excelente calidad, duraderas y evitar alergias o reacciones adversas en la piel. Por ese motivo es muy utilizada en la ropa de bebés ya que los infantes requieren de un cuidado más especial. Además este tipo de prendas poseen gran suavidad al entrar en contacto con la piel.